Hoy 21 de junio, le damos la bienvenida al solsticio de verano.
El solsticio es una pausa donde el sol parece detenerse y alcanza su momento máximo de fuerza y poder, nos invita a reflexionar, evaluar y visualizar nuestro destino.
Es un momento sagrado para la introspección, adentrarnos en el alma y en el corazón, expresar nuestros deseos e intenciones más profundos, integrar nuestras enseñanzas y sentir nuestra conexión con el ciclo de la tierra y el sol.
El Solsticio de Verano es el día más largo del año, donde irradia todo nuestro potencial y singularidad, así como nuestra capacidad de amar y conectarnos en comunidad.
Nos brinda la oportunidad poderosa para armonizar nuestros ciclos internos con los ciclos externos, fortaleciendo así nuestro camino en la vida.
Cuando nos dedicamos tiempo a nosotras mismas y creamos un espacio de reverencia en torno a el solsticio, tomando conciencia de lo que dejamos atrás y hacia dónde anhelamos dirigirnos, nos abrimos a las maravillas que el universo tiene reservadas para nosotras.
Te invito a realizar este ritual Sagrado, especialmente durante este solsticio de verano, donde la magia se encuentra en su apogeo.
Al igual que la Tierra se prepara para sembrar y florecer, tu ser también debe prepararse para recibir la energía del sol y la abundancia del verano.
Además del fuego, otro elemento ancestral que nos purifica es la sal.
Estos dos elementos sagrados serán tus aliados en este ritual.
Toma un puñado de sal y deslízala suavemente sobre tu cuerpo y cabeza, logrando que su poder alquímico libere cualquier energía negativa.
Enciende una o varias velas, sitúate enfrente de ellas, puedes sentarte para estar mas cómoda, lleva tus manos sobre tu corazón, cierra los ojos, regálate unos instantes de conexión y presencia, observa y siente tu hermoso cuerpo sagrado, haz un chequeo de tu cuerpo, sin juzgarte, respira varias veces, puedes utilizar la intención de que, con cada inhalación, inhalas lo que deseas y con cada exhalación sueltas, liberas, transformas lo que no te pertenece, lo que no quieres cargar.
Abres los ojos y observa la llama de las velas como danzan, entrégale tus intenciones y deseos al poder del fuego.
Respira varias veces utilizando la intención de que con cada inhalación te estas iluminando a través de las llamas de las velas, cierra los ojos llevando la intención que empiezas a iluminar tu campo energético, tu cuerpo interior, tu corazón, tus órganos, tu alma, cada parte de tu existencia, siente como estas siendo bañada por la luz de las velas.
Visualízate envuelta en la luz, respira varias veces, lleva tus manos hacia arriba y ábrete, entregándote al astro sol y desde esa conexión permítete recibir la abundancia, la prosperidad y la luz que te entrega el solsticio de verano.
Respira varias veces y agradece todo lo que estás lista para recibir.
En este ritual de limpieza, activación y purificación, aflorará tu esencia más pura y tu energía vibrará en perfecta sintonía.
Además, recuerda siempre emplear el poder de tu voz y de tu intención.
Celebra, canta, danza y eleva tu energía hacia los planos superiores.
Si deseas un cambio en el mundo, comienza por tu propio ser y luego deja que se extienda hacia tu realidad.
Somos una con la madre tierra, una con el Sol, una con toda la humanidad.
Te envío un abrazo infinito de luz y amor de mi alma para tu alma.
Gracias, gracias, gracias.
Esther Avalos
